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Con “e” de Extremadura, un referente en la transición energética española
La transición energética requiere equilibrar el desarrollo renovable y una red eléctrica digitalizada y resiliente para acometer el nuevo escenario. Las transformaciones acometidas en Extremadura durante los últimos años, principalmente en el desarrollo de generación fotovoltaica, la convierten en un ejemplo de este proceso para el resto de comunidades autónomas.
Por Rafael Sánchez Durán
Desde Endesa hemos llegado a afirmar en muchas ocasiones que Extremadura es “un modelo de referencia” en la transición energética de nuestro país y no nos faltan motivos. Para poner de relieve todo el trabajo realizado por esta región en materia energética y su aportación al conjunto del sistema eléctrico español, basta con hacer un repaso por los datos de los últimos años.
En este sentido, en el pasado ejercicio Extremadura alcanzó un hito histórico al conseguir un 99,8% de su producción energética libre de emisiones, frente al 63,3 % nacional. Un récord en la descarbonización del kilovatio que superó a referentes europeos como Francia, que en el mismo año alcanzó un 88%.
Este balance energético limpio de la comunidad extremeña es también netamente exportador, ya que la producción regional supera 5 veces la demanda interna de Extremadura y aporta un 10% al suministro nacional. Esto nos lleva a reflexionar sobre su enorme potencial para captar inversiones y proyectos industriales que busquen una energía limpia y asequible. Este diferencial, que podría superar en 7 veces su demanda en 2025, está haciendo un potente efecto llamada a industrias relacionadas con la transición energética, que promueven asegurar las cadenas de suministro en Europa, dentro de los planes como REPowerEU y el Pacto Verde.
Además, Extremadura es una comunidad líder en producción solar fotovoltaica, representando el 27 % de la potencia y el 25 % de la generación fotovoltaica nacional. Es decir, uno de cada tres nuevos MW instalados de potencia fotovoltaica en España en los últimos años se realiza en esta región. Esta coyuntura se debe, en gran medida a su excelencia en la tramitación de permisos, lo que ha permitido que esta región haya incorporado al parque renovable español un 41% del total.
“Uno de cada tres nuevos MW instalados de potencia fotovoltaica en España en los últimos años se realiza en esta región”.
Dentro de esta contribución, Endesa ha puesto en marcha 1,2 GW de nueva capacidad renovable en Extremadura desde 2019 y ha llegado a instalar hasta el 62% de capacidad en algún año, situando a la región en un eje geográfico estratégico gracias a la riqueza de sus horas de sol. En este momento, Endesa está finalizando dos nuevos proyectos en la provincia de Badajoz que, sumados a lo ya instalado, supondría una cuota de generación total por potencia instalada del 20% en tan solo cinco años.
Pero la transición energética no solo es una aproximación desde la visión de la producción descarbonizada. Según Eurelectric será necesario duplicar la inversión a 2050 en líneas eléctricas y en su digitalización para dar paso a la electrificación como motor para la descarbonización integral de la economía. Se asume que, como regla general, se deberían invertir 0,67 euros en la red por cada euro invertido en generación sin emisiones de CO₂, cifra que actualmente no supera los 0,30 euros. Son actividades reguladas que tendrán que acelerar su compromiso con el horizonte de cero neto a mediados de siglo.
Nuestra filial de redes, e-distribución, es el distribuidor de referencia en la provincia de Badajoz, la de mayor extensión de España, donde distribuimos a un total de 274.000 clientes mediante 1.159 km de red de Alta Tensión de 66kV, 54 subestaciones, una red de Media Tensión de 4.689 km y 12.811 km de red de BT.
Una red moderna, con digitalización basada en 706 telemandos, suficiente en estos momentos para abastecer desde la media y baja tensión. Pero el crecimiento que Extremadura está experimentando también necesita recibir nuevos ejes de 400 kV que permitan desarrollar mayor potencial de la mano de proyectos industriales y con necesidad electro intensiva.
Esperamos seguir construyendo en este siglo una región prospera, no solo basada en su recurso natural, sino, como ahora atisbamos, basada en la oportunidad que le otorga ser la comunidad líder en la transición energética española.