Puede parecer que el transporte sostenible es algo del futuro. Sin embargo, la movilidad eléctrica es ya una realidad presente en la sociedad. Actualmente, hay alrededor de 12 millones de coches eléctricos en funcionamiento recorriendo diferentes carreteras del mundo entero. De estos, tres millones se vendieron a lo largo del año 2020.
Sin duda, la electrificación es la forma más rentable y eficiente de descarbonizar el consumo final de energía del transporte. En concreto, los coches eléctricos pueden ser hasta 5 veces más eficientes que los vehículos de combustión interna (diésel o gasolina) y 2,3 veces más eficientes que los de hidrógeno.
Para alcanzar los objetivos climáticos, necesitamos electrificar el consumo final tanto como sea posible. De hecho, según BloomerangNEF (BNEF) y Agencia Internacional de la Energía (IEA por sus siglas en inglés), en 2021 el 9 % del mercado mundial de automóviles es eléctrico. Pero, para alcanzar las cero emisiones netas en 2050, el 60% de los vehículos vendidos a nivel mundial deben ser eléctricos para 2030 y el 100% a partir de 2035.
La movilidad eléctrica ya no solo hace referencia a los automóviles. Otros segmentos del sector del transporte por carretera también están experimentando un aumento de la tasa de electrificación. Ahora, hay más de 500.000 autobuses eléctricos en uso, casi 350.000 camiones – ligeros en su mayoría - y alrededor de 190 millones de vehículos de dos ruedas en todo el mundo.
En cuanto al transporte marítimo, aunque este también está haciendo sus progresos, actualmente la electrificación se limita a transbordadores marítimos (ferris) y embarcaciones de distancia corta. A corto plazo, se espera que los barcos eléctricos sean económicamente competitivos con otros sistemas de propulsión bajos en carbono, solo para distancias de hasta 200 km.
¿Por qué la electrificación del transporte es buena para mi?
Cuando decimos que el futuro de la movilidad es eléctrico es porque no solo beneficia al planeta, también beneficia a la sociedad en general.
Una de las principales ventajas de la movilidad eléctrica es que mejora la calidad del aire en las comunidades donde vivimos. Esto quiere decir que, al no emitir gases tóxicos, mejora la calidad de vida de todas las personas. Así, al prescindir de motores de combustión, se evita la emisión de toneladas de gases de efecto invernadero. Lo que nos ayuda a mitigar el cambio climático y asegurar un futuro mejor a las siguientes generaciones.
Las alternativas de movilidad sostenible que tenemos en la actualidad son realmente amplias: coches, bicicletas, patinetes... Y todas ellas tienen algo en común: reducen la contaminación auditiva puesto que prácticamente no emiten ningún sonido, lo que beneficia a toda la sociedad.
Otra de sus ventajas es que proporciona un mayor nivel de comodidad durante la conducción y permite disfrutar de aceleraciones más suaves. Además, aunque muchas personas consideran que los motores eléctricos no ofrecen la misma potencia y velocidad que los de combustible, esto no es cierto. Ofrecen potencia inmediata y continua a lo largo del trayecto. Simplemente, hay que prestar atención a la batería y, afortunadamente, cada vez existen más puntos de recarga.
Aunque son muchos los beneficios de la movilidad eléctrica, y en particular de los coches, hay una ventaja que destaca por encima del resto. El gasto económico que suponen es sustancialmente inferior, llegando a consumir la mitad de la energía que uno de combustión. Por lo que, aunque la inversión inicial puede ser elevada, es una gran inversión a largo plazo.
Además del ahorro energético, los coches eléctricos también se caracterizan por tener un 90% menos de componentes. Esto, sumado al menor desgaste y fricción, los convierte en vehículos de fácil mantenimiento.
Ventajas de los vehículos eléctricos
Mejoran la calidad del aire
Mejoran la calidad del aire
Mejoran la calidad del aire
Reducen la contaminación
Reducen la contaminación
Reducen la contaminación
Ofrecen mayor comodidad en la conducción
Ofrecen mayor comodidad en la conducción
Ofrecen mayor comodidad en la conducción
Suponen un ahorro económico
Suponen un ahorro económico
Suponen un ahorro económico
Facilitar la recarga, clave para fomentar el uso de vehículos eléctricos
Uno de los puntos que más inseguridad genera en los conductores a la hora de decantarse por un vehículo eléctrico suele ser la falta de una infraestructura consistente. Por eso, desde Endesa trabajamos para facilitar el acceso a puntos de recarga públicos y privados. Nuestro objetivo es alcanzar los 56.000 puntos operativos a cierre de 2023.
Actualmente, la red de Endesa cuenta con más de 2.800 puntos de recarga: 2.100 puntos en ciudades, más de 400 en carreteras y cerca de 250 en entornos rurales. Dentro de estas cifras, están incluidos los 76 cargadores de carga ultrarrápida que hemos desplegado en 2021.
Para facilitar aún más la recarga del vehículo eléctrico, hemos desarrollado Endesa X JuicePass. Una aplicación móvil que permite localizar y reservar el cargador más cercano, entre más de 90.000 puntos de recarga repartidos por Europa y Latinoamérica.
Además, también estamos llegando a acuerdos con diferentes compañías para que nos permitan acercar los puntos de recarga a los usuarios, con el objetivo de que la transición a la movilidad eléctrica sea cada vez más sencilla.
Por último, JuiceBox Pro Cellular es nuestro equipo de recarga inteligente para entornos privados o residenciales. Con una instalación disponible en dos modalidades - para casas unifamiliares o para garajes comunitarios - este cargador permite completar el 100% de la batería del coche en 4 horas aproximadamente.
Las ciudades deben convertirse en un actor cada vez más relevante e implicado en la movilidad sostenible. Por eso, en Endesa seguiremos apostando por esta movilidad, basada en el cambio de uso modal y la electrificación del transporte.