¿Qué es una microgrid o microrred?

Detalles de una microgrid/microrred

Es una red de producción y distribución local de electricidad que suele usarse para complementar aquellos momentos de pico de demanda energética. Sin embargo, si hay algo que convierte a una microgrid en un sistema especialmente útil y esencial es que puede funcionar de forma autónoma e independiente, incluso cuando se desconecta de la red principal.

Esto significa que no depende del abastecimiento de otra red, sino que es capaz de mantenerse operativa incluso cuando ocurre algún suceso que afecte a la principal. A veces, las microgrids son capaces de funcionar de forma aislada en caso de no exista una red principal. Esto sucede, por ejemplo, en algunas islas que se encuentran lejos de tierra firme.

¿Qué componentes tiene una microrred?

Para conocer de cerca el funcionamiento de una microrred, es necesario saber qué elementos la conforman. En el epicentro de su instalación, este tipo de sistemas cuenta con un generador eléctrico que puede funcionar con gas, sol o viento.

También posee unidades de almacenamiento de energía que, gracias al enorme avance que ha habido en materia electroquímica, son capaces de contener la energía suficiente para aquellos momentos en los que, ya sea por un apagón o por autosuficiencia, la microgrid tenga que operar de manera independiente.

Un sistema operativo permite que la microgrid funcione de forma segura y efectiva a través de su control, con sensores y algún software que permita manejar la instalación. Herramientas más novedosas, como la inteligencia artificial o el Machine-Learning, han sido incorporadas también a las microrredes para mejorar su consumo y ampliar su eficiencia.

Beneficios de contar con una microgrid

Tanto si es para responder ante altas demandas de energía, como para abastecer de electricidad de forma independiente, las microrredes tienen diversas ventajas:

• Ahorro de costes: una microgrid puede ayudarnos a optimizar el coste de la energía, porque es capaz de combinar recursos renovables con otros. Esto, además de reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles, puede ayudar de forma particular al bolsillo, ya que permitirá emplear su propia electricidad en aquellos momentos de alta demanda donde los precios suelen estar más altos.
• Menos emisiones: al poder utilizar recursos renovables como fuente energética principal, las microgrids emiten menos dióxido de carbono a la atmósfera.
• Instalación más fiable: al no ser dependiente de otras redes, las microrredes proporcionan fiabilidad al sistema eléctrico en zonas que sean especialmente sensibles a los apagones.
• Mayor resiliencia: ante desastres naturales u otras interrupciones en el funcionamiento de la red, las microgrids pueden mantenerse dando energía, incluso en momentos muy críticos.
• Independencia total: al poder generar energía de forma aislada, las microrredes permiten ser independientes de la red principal.

Desventajas de usar una microgrid

Aunque las microrredes normalmente se emplean para mejorar o respaldar una red eléctrica, también hay algunos puntos desfavorables o en contra que pueden afectar a su instalación:

• Inversión inicial: uno de los primeros “puntos de dolor” a la hora de pensar en una microgrid, es que su implementación puede conllevar una inversión de dinero bastante elevada. Su infraestructura y componentes suelen tener un alto coste, al igual que su mantenimiento.
• Escalabilidad limitada: las microrredes suelen emplearse en áreas pequeñas, como comunidades locales, polígonos industriales o espacios muy concretos como islas muy alejadas de tierra firme. Si estas áreas crecen, la posibilidad de ampliar la microgrid no es nada fácil.
• Mayor planificación en la gestión: tanto por su diseño como por su gestión, las microrredes pueden resultar algo más complejas que la red eléctrica normal, porque conlleva la planificación de las necesidades de consumo.

Ejemplos de cómo funcionan microgrids reales

Las microrredes llevan algún tiempo abasteciéndonos de energía cuando más lo necesitamos. Te mostramos algunos de los ejemplos más ilustrativos de cómo permiten mejorar la red con total seguridad:

Hawaii (Estados Unidos)

Este archipiélago de playas paradisíacas de agua cristalina, arena blanca y fina, se nutre de una microgrid situada en la isla de Molokai, que funciona gracias a la combinación de energía solar y eólica, con un potente almacenamiento.

Brooklyn (Nueva York – EEUU)

Algunos de los tejados de las viviendas en el distrito neoyorquino de Brooklyn cuentan con paneles solares, que le han permitido a su comunidad instalar una microrred para comprar y vender energía de forma local, sostenible y descentralizada.

Mina de oro en Agnew (Australia)

Los lugares remotos son otro de los casos en los que las microgrids pueden ser especialmente útiles. La mina de oro de Agnew, ubicada en Waroonga (Australia Occidental), combina energías renovables con el gas para alimentar sus baterías.