Apostando por el futuro de nuestros pueblos
Apadrinaunolivo.org es un proyecto que impulsa desde hace 9 años el desarrollo rural a través de la recuperación de recursos naturales y endógenos de la zona, como base de una economía sostenible y solidaria. Jose Alfredo Martín Piñas cuenta las oportunidades de crecimiento en el territorio que proyecta este modelo en los próximos años con el apoyo de Endesa en la recuperación de 60.000 olivos.
Por Jose Alfredo Martín
Apadrinaunolivo.org es un modelo de emprendimiento rural nacido en 2014 para generar desarrollo rural sostenible en áreas escasamente pobladas. Genera un triple balance y alto impacto social, enmarcado en nuestras 5 S, somos Sociales, Solidarios, Sostenibles, Saludables y Solares.
Este 2023 y en los próximos cinco años, desde Apadrinaunolivo.org nos vemos involucrados en nuevos retos. Y es que formamos parte del plan socioeconómico de Endesa como iniciativa para rediseñar el futuro de la comarca de Andorra-Sierra de Arcos tras el cierre de la central térmica, con el proyecto del “Huerto solar a la mesa”. Una propuesta con la que podemos seguir dando vida y trabajo a los pueblos que se han visto afectados por esta situación. Para conseguir esta dinamización Endesa nos va a apoyar en la recuperación de 60.000 olivos que supone la generación de 96 empleos con diferentes temporalidades.
Una gran oportunidad pues supone un dimensionamiento de la estructura interna de todas las áreas del proyecto: campo, almazara y conservera. Un desafío ilusionante para lograr la propia sostenibilidad en los próximos 6 años y seguir contribuyendo a nuestro principal propósito de desarrollo rural, porque supone una transformación con muchas expectativas para asentar población en el territorio, que actualmente se encuentra amenazado por el éxodo rural. Al igual que tenemos el reto de seguir demostrando que sí es posible un futuro para el medio rural con una iniciativa de emprendimiento social, que pone en valor los recursos endógenos para generar desarrollo rural sostenible.
“Endesa nos va a apoyar en la recuperación de 60.000 olivos que supone la generación de 96 empleos”.
Tras años de conversaciones, Endesa ha apostado por este modelo por la estabilidad que aporta en un territorio, en este momento de transición para la comarca. Nuestra innovación radica en cómo somos capaces de poner en valor cultivos que yacen abandonados a consecuencia de la despoblación, involucrando a la sociedad y las empresas a través de la plataforma, desencadenando un impacto social, económico y medioambiental positivo. Un modelo que ha sido reconocido por la revista Forbes en su artículo “la lista de los 100 más creativos en el mundo de los negocios”, entre otros.
Recuperación de recursos naturales, un motor de economías sostenibles
Todo comienza con el objetivo de recuperar 100.000 olivos abandonados de Oliete, Teruel. Una localidad con escasos 340 habitantes y con pocas oportunidades de desarrollo socioeconómico. ¿La solución? buscamos padrinos y madrinas que a través de la web pueden elegir el olivo a recuperar, bautizarlo y hacer un seguimiento sobre su proceso de recuperación, recibiendo, además, por su colaboración 2 litros de aceite de oliva.
Con su aportación contratamos agricultores, la gran mayoría nuevos pobladores, que de esta manera pueden trabajar olivos que en los 5 primeros años de recuperación gozan de una escasa rentabilidad. Igualmente, damos oportunidad a personas con discapacidad intelectual, en exclusión socio-laboral, mujeres del medio rural con pocas oportunidades de acceso a empleo y jóvenes. Así, con la palanca de Endesa de recuperar en los próximos 5 años 60.000 olivos, se podrá aumentar el número de trabajadores en el campo, y a su vez, esto repercutirá en un aumento de la producción de olivas.
En estos 9 años, hemos empleado 22 familias. Sus hijos han logrado evitar el cierre de la escuela de Oliete y Alacón. Los comercios y restaurantes de la zona disfrutan de un turismo anual de 3.000 padrinos y madrinas, que vienen a visitar su olivo. Gracias a la donación anual por el apadrinamiento, ya son 15.000 olivos recuperados. La conservación de los olivares favorece, no solo, un impacto social en la zona, también medioambiental, contribuyendo a la mitigación de 6,9 toneladas de CO2. Además, es un modelo que actúa bajo la custodia del territorio, es decir, un conjunto de estrategias e instrumentos donde implicar a los propietarios y usuarios del territorio en la conservación y el buen uso de los valores y los recursos naturales, culturales y paisajísticos. Cifras que esperamos, con este nuevo plan, aumenten y aporten estabilidad en los años venideros, creando así un nuevo modelo económico diversificado basado en recursos naturales del territorio y energías renovables.
“Una iniciativa de emprendimiento social, que pone en valor los recursos endógenos para generar desarrollo rural sostenible”.
Otro de los pilares que también se van a ver transformados es nuestra marca de comercio justo MiOlivo.org, un espacio donde reunimos distintos productos como el aceite de oliva virgen extra, fruto de la recuperación de olivos centenarios, y las conservas vegetales. Gracias a las ventas de estos productos, Mi Olivo, la marca del aceite de oliva virgen extra, se empodera a través de su producción en nuestra almazara a 150 pequeños agricultores a los que se les retribuye con un precio que hace que sus explotaciones sean rentables y más sostenibles. Generando así bienestar y evitando el futuro abandono de cultivos por las pésimas condiciones del mercado. De manera similar, en 2021 iniciamos la recuperación de Alacón, pueblo próximo a Oliete, y sus huertas abandonadas, mediante la marca de conservas “Mi Huerto”. Esto también tendrá su transformación empleando a personal para el trabajo de las huertas y los pedidos.
Además, Endesa también ha confiado en el equipo de Apadrinaunolivo.org en su estrategia de energías renovables del país lusitano, con el objetivo de reactivar una economía sostenible, con “Apadrinha uma Oliveira”. Para ello, estamos iniciando la réplica de este modelo innovador en Portugal, en la zona de Abrantes, que asiste a un escenario muy similar al que sufre Oliete y donde el éxodo rural está provocando el abandono de cultivos de manera generalizada en una localidad en la que se encuentra el olivo más antiguo de la península ibérica, el Mouchao, con 3.350 años.
Tenemos muchas esperanzas en que nuestro modelo inspirador basado en la transición justa, ecológica, digital e inclusiva, sirva para que el medio rural también pueda liderar la vanguardia digital sumado al plan de Endesa y todos los proyectos involucrados en el territorio.
Una gran oportunidad pues supone un dimensionamiento de la estructura interna de todas las áreas del proyecto: campo, almazara y conservera. Un desafío ilusionante para lograr la propia sostenibilidad en los próximos 6 años y seguir contribuyendo a nuestro principal propósito de desarrollo rural, porque supone una transformación con muchas expectativas para asentar población en el territorio, que actualmente se encuentra amenazado por el éxodo rural.
Tras años de conversaciones Endesa ha apostado por este modelo por la estabilidad que aporta en un territorio, en este momento de transición para la comarca. Nuestra innovación radica en cómo somos capaces de poner en valor cultivos que yacen abandonados a consecuencia de la despoblación, involucrando a la sociedad y las empresas a través de su plataforma, desencadenando un impacto social, económico y medioambiental positivo. Un modelo que ha sido incluido por la revista Forbes en su artículo “la lista de los 100 más creativos en el mundo de los negocios”.
Todo comienza recuperando los 100.000 olivos abandonados de Oliete, Teruel. Una localidad con escasos 340 habitantes y sin ningún porvenir socioeconómico. ¿La solución? buscar padrinos y madrinas que entrando en su web pudieran elegir el olivo a recuperar, bautizarlo y hacer un seguimiento sobre su proceso de recuperación, recibiendo, además, por su colaboración 2 litros de aceite de oliva.
Su aportación sirve para contratar agricultores, la gran mayoría nuevos pobladores, que de esta manera pueden trabajar olivos que en los 5 primeros años de recuperación gozan de una escasa rentabilidad.
Son ya 22 familias las que emplea el proyecto. Sus hijos han logrado evitar el cierre de la escuela de Oliete y Alacón. Los comercios y restaurantes de la zona disfrutan de un turismo anual de 3.000 padrinos y madrinas, que vienen a visitar su olivo. Gracias a la donación anual por el apadrinamiento, ya son 15.000 olivos los que yacen recuperados. La conservación de los olivares favorece, no solo, un impacto social en la zona, también medioambiental, contribuyendo a la mitigación de 6,9 toneladas de CO2. Además, es un modelo que actúa bajo la custodia del territorio, es decir, un conjunto de estrategias e instrumentos donde implicar a los propietarios y usuarios del territorio en la conservación y el buen uso de los valores y los recursos naturales, culturales y paisajísticos.
Por último, con su marca de comercio justo MiOlivo.org, un espacio donde reúnen distintos productos como el aceite de oliva virgen extra, fruto de la recuperación de olivos centenarios, y conservas vegetales. Gracias a la venta de estos productos, Mi Olivo, marca del aceite de oliva virgen extra, empodera a través de su producción en la almazara del proyecto a 150 pequeños agricultores a los que se les retribuye con un precio que hace sus explotaciones sean rentables y más sostenibles. Generando así bienestar y evitando el futuro abandono de cultivos por las pésimas condiciones del mercado. Siguiendo un propósito similar, en 2021 se inició la recuperación de Alacón, pueblo próximo a Oliete, y su huerta abandonada, mediante la marca de conservas “Mi Huerto”.
Además, Endesa también ha confiado en el proyecto de recuperación de olivos en su eje del país lusitano, con el objetivo de reactivar una economía sostenible. Para ello, se ha iniciado la réplica del modelo innovador de Apadrinaunolivo.org en Portugal, en la zona de Abrantes, donde se asiste un escenario muy similar al que sufre Oliete, donde el éxodo rural está provocando el abandono de cultivos de manera generalizada.
Este 2023 y los próximos cinco años, la entidad de Apadrinaunolivo.org se ve involucrada en nuevos retos. Y es que forman parte del plan socioeconómico de Endesa como iniciativa para rediseñar el futuro de la comarca de Andorra-Sierra de Arcos tras el cierre de la central térmica. Una propuesta para dar vida y trabajo a los pueblos que se vieron afectados por esta situación. Para conseguir esta dinamización Endesa va a apoyar en la recuperación de 60.000 olivos que supone la generación de 100 empleos con diferentes temporalidades.
Una gran oportunidad que como indica Jose Alfredo Martín, cofundador del proyecto, “supone un dimensionamiento de la estructura interna de todas las áreas: campo, almazara y conservera. Un desafío ilusionante para lograr la propia sostenibilidad en los próximos 6 años y seguir contribuyendo a nuestro principal propósito de desarrollo rural, porque supone una transformación con muchas expectativas para asentar población en el territorio, que actualmente se encuentra amenazado por el éxodo rural”.
Además, Endesa también ha confiado en el proyecto de recuperación de olivos en su eje del país lusitano, con el objetivo de reactivar una economía sostenible. Para ello, se ha iniciado la réplica del modelo innovador de Apadrinaunolivo.org en Portugal, en la zona de Abrantes, donde se asiste un escenario muy similar al que sufre Oliete, donde el éxodo rural está provocando el abandono de cultivos de manera generalizada.