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Cada 22 de mayo, Naciones Unidas nos recuerda a través del día Mundial de la Diversidad Biológica la importancia de convivir con la naturaleza de forma sostenible. Este año con el lema “Construir un futuro compartido para todas las formas de vida”, se pone en valor la biodiversidad, como respuesta a varios retos del desarrollo sostenible. Desde las soluciones basadas en la naturaleza, los problemas de salud, la seguridad alimentaria y del agua, y los medios de vida sostenibles, la biodiversidad es la base sobre la que podemos volver a construir mejor.
La humanidad se enfrenta a una crisis ambiental sin precedentes cuyo origen se encuentra en ella misma, en su propia actividad. El desarrollo económico moderno, basado en los combustibles fósiles y la sobreexplotación de los recursos naturales, está provocando la desaparición de los ecosistemas que son los encargados de ofrecernos todo lo necesario para que sea posible la vida en nuestro planeta. En efecto, a pesar de todos los avances tecnológicos, dependemos por completo de ecosistemas si queremos disponer de agua, alimentos, medicamentos, ropa, combustible, refugio y energía, solo por nombrar algunos ejemplos.
La ciencia nos advierte de la urgencia de adaptar la sociedad a una nueva situación. En palabras del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de Naciones Unidas para evaluar la ciencia relacionada con el cambio climático (IPCC, por sus siglas en inglés):
“A fin de evitar una mayor pérdida de vidas, biodiversidad e infraestructura, es preciso tomar urgentemente medidas ambiciosas de adaptación al cambio climático y, a la vez, lograr reducciones rápidas y pronunciadas de las emisiones de gases de efecto invernadero”.
La humanidad necesita un cambio medioambientalmente disruptivo, transversal, capaz de integrar conceptos como la descarbonización, la recuperación y conservación de la naturaleza dentro de un desarrollo sostenible. Este cambio requiere de la implicación directa de todos los actores de la sociedad, sin excusas.
Desde su origen, Endesa mantiene un importante compromiso con la biodiversidad. Hace más de 40 años que la compañía desarrolla proyectos destinados a minimizar el impacto ambiental. Como las restauraciones asociadas a la actividad de minería, mediante las que se han recuperado más de 5.000 hectáreas con una inversión de más de 100 millones de euros; o plantando más de 1,5 millones de árboles en todo el territorio nacional, lo que ha dado lugar a espacios naturales de alto nivel natural y de reconocido prestigio.
Desde entonces, trabajamos día a día en mejorar nuestro desempeño ambiental, por el bien del planeta y de nosotros mismos, renovando nuestro compromiso de mejora continua en aspectos tan importantes como el cambio climático, la no pérdida neta de biodiversidad o la economía circular.
De forma adicional al estricto cumplimiento del marco regulatorio de aplicación en materia medioambiental, Endesa desarrolla una importante actividad de mejora y conservación del capital natural, los servicios ecosistémicos y la biodiversidad. Ya en su primera Política Medioambiental aprobada y publicada en 1998, se contemplaba la conservación de la biodiversidad estableciéndose como uno de los principios de referencia: “Conservar el entorno natural de sus instalaciones mediante la adopción de medidas para proteger las especies de fauna y flora y sus hábitats”. Asimismo, la conservación de la biodiversidad ya se estableció como uno de los siete Compromisos por un Desarrollo Sostenible en el marco del primer Plan Estratégico de Sostenibilidad.
Además, Endesa completa su dilatada trayectoria en la conservación de la biodiversidad con el Plan de Conservación de la Biodiversidad aprobado en 2012. Un documento que incluye el desarrollo de al menos 25 proyectos voluntarios anualmente orientados a la protección y conservación de especies amenazadas, de espacios y hábitats, aumento del conocimiento científico, puesta en valor de la biodiversidad y desarrollo de herramientas que ayudan a entender la interacción de la biodiversidad con la actividad que Endesa desarrolla
Como colofón a esta trayectoria integral cabe señalar la Política de Biodiversidad de Endesa aprobada por el consejo de administración de la compañía en enero de 2020, coincidiendo con la puesta en marcha de un Comité interno de Biodiversidad donde participan todos los negocios de la compañía, se insertan los preceptos de la Política, se debaten, aprueban y ponen en marcha los proyectos del Plan de Conservación de la Biodiversidad y se pone en común toda la experiencia, conocimiento y sinergias de todos los miembros del citado Comité.
Precisamente esta semana, y como ejemplo concreto y llamativo, hemos comunicado el uso de un sistema de iluminación láser único en el mundo para proteger a un ave de Canarias, la pardela, en el entorno de uno de nuestros parques eólicos. Innovación y conservación de la biodiversidad van así de la mano para hacer sostenible nuestra actividad de generación limpia.