La histórica mina de Riotinto será la primera mina en España que contará con su propia instalación de autoconsumo solar fotovoltaico, gracias a un acuerdo entre Endesa y Atalaya Mining, y está llamada a ser una de las mayores instalaciones de autoconsumo industrial del país.
Esta instalación permitirá reducir la emisión de 40.000 toneladas de CO2, equivalentes al consumo de 173.000 barriles de petróleo, una cantidad igual al petróleo que consumen en total unos 20.000 españoles en un año.
Riotinto es una mina de cobre a cielo abierto, y con este proyecto consolida su carrera hacia la innovación, que le ha llevado a contar con un equipo tecnológico de primer nivel, que incluye todos los conceptos de seguridad y sostenibilidad ambiental propios de la minería del siglo XXI.
“Este acuerdo supone el arranque de un proyecto que nos ilusiona especialmente; una vez más, demostramos a la sociedad que la minería andaluza está a la vanguardia de la industria, y que el compromiso con la sostenibilidad de Atalaya es real”, comentó al respecto Enrique Delgado, director general de Atalaya Mining.
Y es que este proyecto marcará un hito en la sostenibilidad de la actividad minera, ya que es preciso tener en cuenta que el consumo eléctrico representa el 70% de la huella de carbono de la operación minera.
En total se instalarán 75.765 paneles fotovoltaicos, de 650 y 655 Wp de potencia e inversores de última tecnología, montados en una estructura metálica de acero, diseñada siguiendo las características del terreno para aprovechar de la forma más eficiente el recurso solar.
“Esta instalación de autoconsumo, récord por tamaño, se aplica por primera vez a un proceso industrial para mejorar su competitividad y compromiso ambiental. La faja pirítica de Huelva puede encontrar en este proyecto el camino a seguir, para garantizar el suministro de minerales autóctonos, un elemento prioritario en la seguridad estratégica de la Unión Europea”, opinó el director general de Endesa en Andalucía, Extremadura, Ceuta y Melilla, y aprovechó para recordar que la energía es un factor clave para la actividad minera y su uso responsable y sostenible son un requisito clave dentro del Pacto Verde Europeo y la Nueva Estrategia Industrial.
En definitiva, esta instalación, que ocupará una superficie de captación solar de 234.810 m2 y que estará emplazada en 60 hectáreas de suelos mineros históricos, constituye una apuesta sólida por la reducción de la huella de carbono de la actividad minera.
"La apuesta por este proyecto de aprovechamiento de los recursos naturales a través de la solución solar fotovoltaica, además de facilitar independencia energética, supone una optimización y ahorro sustancial en sus consumos, ayudando a Atalaya Mining a minimizar su huella medioambiental”, detalló Davide Ciciliato, director general de comercialización de Endesa.
La planta fotovoltaica de 50 MW contará con una subestación que realizará transformación eléctrica de 132 a 30 kilovoltios y con una línea de conexión desde esta subestación a la del cliente. Todo esto proporcionará a la operación minera un suministro completamente renovable y de gran calidad que se adaptará a sus necesidades eléctricas, proporcionando energía verde proporcional al suministro de un municipio de 14.500 habitantes durante 12 meses.
Para construir esta nueva infraestructura de 50 MW de potencia, se invertirán 30 millones de euros. Y una de las grandes ventajas es que esta instalación fotovoltaica quedará en servicio incluso después del fin de la vida de explotación minera, generando empleo e ingresos para el territorio de manera indefinida.
El acuerdo se concreta en un contexto global complejo, en el que se ha puesto de manifiesto la necesidad de avanzar en la independencia energética, tal como destacó el director general de comercialización de Endesa.
“Este es un proyecto estratégico, tanto para Endesa como para el país, por desarrollar nuevas fuentes alternativas de energía, clave para fomentar la independencia energética tanto nacional como europea”, resaltó Ciciliato.