
Verlo siempre en Español
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La inteligencia artificial y el big data que están creando la ciudad del futuro deben estar al servicio del ciudadano para ofrecerle nuevas utilidades, pero también para defenderlo de las vulnerabilidades que surgen con el nacimiento de nuevas tecnologías.
La era de la digitalización aterrizó hace unos años para cambiar por completo cómo las empresas gestionan su información, así como su forma de llegar a la población, que cuenta con sobreinformación que en muchos casos acaba derivando en la aceptación de noticias falsas o fake news.
Hoy en día, las noticias falsas se extienden más rápido que la verdad. Hay estudios que confirman esta teoría y la achacan a las tecnologías de comunicación actuales, como las redes sociales y las aplicaciones de mensajería instantánea. Además, estas historias falseadas cuentan con la capacidad de modificar, a largo plazo, la capacidad que tienen las personas de distinguir entre lo que es verdad y lo que no.
La necesidad de combatirlas es absoluta y para ello debe invertirse en innovación para conseguir las últimas técnicas basadas en big data y machine learning. Con ellas, no solo conseguimos mejoras en la gestión de la energía, sino que las herramientas que transmiten la información pueden llegar a ser capaces de etiquetar aquellas noticias que sean verídicas, aportandoles el valor que merecen.
‘Fake News: el valor de la información verdadera’ fue precisamente el nombre de la ponencia de Nathalie Picquot, Directora General de Twitter España, en el Talking About Twitter de Granada en el que colaboramos. Este evento mostró la importancia de la apuesta por los valores positivos en la era digital, por encima de la desinformación que generan algunas malas prácticas que comienzan a darse en Internet.
Un grupo de expertos mostró las claves innovadoras para resolver un problema que pretende distorsionar la veracidad de la información en los próximos años: El premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz; el director de asuntos públicos y comunicaciones de la OECD, Anthony Gooch; la directora de tecnología, medios y comunicaciones de la Universidad de Columbia, Anya Schiffrin, y el profesor invitado en la Universidad George Washington, Javier Lesaca.
A este respecto, Stiglitz ha incidido en que “nunca hemos tenido este nivel de desinformación”, si bien “tampoco los mecanismos con los que contamos para hacerle frente”. Por su parte, Schiffrin ha hecho hincapié en las diferentes formas de aproximarse a las noticias falsas de Estados Unidos y la Unión Europea. Mientras que Estados Unidos está “buscando aproximarse desde una perspectiva de mercado” la UE “apuesta por la regulación”. En cuanto a los medios de comunicación, la de la Universidad de Columbia se ha mostrado preocupada por la distancia entre audiencia y medios: “a la gente no le importa compartir noticias falsas siempre que refuercen sus creencias”, comentaba.
Gooch, de la OECD, lanzaba, además de plantear una breve guía de principios para sobrevivir en la era de la posverdad, una reflexión sobre la utilidad de las redes sociales: “debemos plantearnos hasta qué punto podemos ver las redes como un motor para el renacimiento de la democracia” y si “los nativos digitales tienen el espíritu crítico necesario en las mismas. Por último, Lesaca, acompañado de Alex Romero, apuntaba al respecto que las redes sociales son sólo una “parte de una estrategia de comunicación muy clara”. Los actores que trazan estas estrategias “diseñan una narrativa digital disruptiva, producen una red de contenidos propios y los distribuyen masivamente en busca de su público”. Concluyó reflexionando que a veces “la parte negativa puede eclipsar el lado positivo de las redes”.
A través de diferentes ponencias y un panel final en el que discutieron sobre las últimas innovaciones en esta materia, los diferentes expertos hablaron de los riesgos y las oportunidades que el big data ofrece para crear la ciudad del futuro, con dispositivos conectados en los que toda la información sea correcta y esté verificada.
Las instituciones responsables ya han creado grupos de trabajo para estudiar el alcance de las fake news, además de comenzar a regularizar su situación. Las organizaciones, por su parte, también están desarrollando nuevas tecnologías innovadoras que ayuden a reducir y eliminar la desinformación que estas producen, pero aún hay mucho trabajo por delante.
Nuestra presencia en el Talking About Twitter de Granada estuvo basada en la responsabilidad corporativa en redes sociales, y para ello contamos con la presencia de diferentes expertos en comunicación que conocen la necesidad de una correcta gestión de la información.
Unos 12 asistentes que pusieron de relieve la responsabilidad con la que las organizaciones deben actuar para estar alineadas con unos valores de información adecuados para el ciudadano y sus necesidades.
Además, algunos de ellos participaron previamente en un nuevo #EndesaChallenges para descubrir uno de los proyectos de responsabilidad corporativa que hemos llevado a cabo. La ‘Ruta de la luz’ fue una experiencia mediante la que conocer los esfuerzos de la Fundación Endesa por conseguir que muchos de los grandes monumentos de ciudades como Granada consigan el máximo ahorro energético. Alguno de estos expertos fueron: Francisco Morcillo, Antonio García Celda, Sergio Fernández, Antonio Serrano, Othame Amesnaou y Marcos González.
La gestión de la información en la smart city debe fluir entre las organizaciones y los ciudadanos a través de técnicas innovadoras que velen por la veracidad de la información. La voluntad de las empresas y de las instituciones, a nivel local e internacional, permite continuar en la investigación y el desarrollo de tecnologías que logren que las fake news no sean una tarea a resolver en la ciudad del futuro.