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A 1.580 metros de altura el mundo cambia
A 1.580 metros de altura el mundo cambia. Cuando vas serpenteando la carretera que comunica Aldeavieja (Ávila) con el Puerto de Cruz del Hierro, el punto más alto de la Sierra de Ojos de Albos, ves como vas dejando atrás el pueblo y empiezas a encontrar molinos eólicos a pleno rendimiento, zorros que campan tranquilamente a sus anchas, aves de todo tipo y una vegetación única capaz de resistir las inclemencias del tiempo en esta estepa castellana.
Cuando te vas acercando a la cumbre parece que entras en otro mundo. Atrás queda el sol, y empiezas a estar rodeado de nubes, de niebla que se mueve con rapidez empujada por un viento a veces furioso que no te deja ni mantener una conversación. Pero allí te encuentras a gente hecha de otra pasta, se han curtido con el clima gallego, para ellos las inclemencias del parque eólico de Aldeavieja de Endesa a más de 1.500 metros de altitud son su día a día.
Wenceslao y Pablo llevan mirando toda la semana las previsiones meteorológicas, tienen que desmontar los 22 aerogeneradores del parque eólico de Aldeavieja de Endesa. Pero el tiempo no ayuda, “si sopla viento no se puede desmontar el aerogenerador que tiene una altura de 45 metros hasta buje, donde salen las palas, y si hay mucha niebla tampoco porque no se ve nada”, comentan.
Llevan esperando toda la semana, pero parece que hoy es el día. A las ocho de la mañana hay mucha niebla, pero saben que despejará en breve, así que empiezan a convocar al equipo. Javier, Pablo, Hossu, José, Jacinto, Tito … todos están preparados, cada uno sabe la posición que ocupa en el proceso de desmontaje de un aerogenerador.
La grúa se ha puesto en marcha, todos se suben el cuello de la chaqueta, se ponen chaleco, casco y guantes, se cubren para ganar esa batalla al viento que sopla incesante, pero hoy a baja intensidad, como un susurro. Sin duda es el día.
“¡Vamos!”. Cada uno se posiciona en su ubicación, hasta la niebla y el viento parece que mantienen la respiración. La grúa empieza a moverse, las cuerdas guían la trayectoria del rotor que a medida que desciende se ve en su dimensión real, como si de una noria se tratara. En pocos minutos está en el suelo, ahora toca desmontar las tres palas de 22 metros cada una. Destornillador eléctrico en mano la cuadrilla se pone manos a la obra, el viento empieza de nuevo a susurrar suavemente, al compás del sonido de las herramientas y las órdenes en gallego que se mezclan con el castellano.
En menos de 10 horas el aerogenerador número 15 se ha desmontado. Sus piezas descansan en el suelo reposando después de 24 años de servicio produciendo energía limpia. Pero es un descanso momentáneo, su buen estado permite que puedan tener una segunda vida, servir de repuesto en otras plantas, algunas viajarán a otros países, otras se quedarán en España, es el concepto de economía circular aplicado realmente.
Va quedando menos. La operación del equipo de trabajo sigue más adelante, hay que aprovechar el día. Todos se siguen moviendo de un lado a otro, mientras la niebla acecha detrás de la montaña, expectante.
Está llegando el invierno, los trabajos de desmantelamiento siguen su curso, pero ahora toca preparar los caminos para permitir seguir aprovechando la energía del dios Eolo a través de cuatro nuevos aerogeneradores que reemplazarán a los 22 que el equipo de Wenceslao y Pablo ha desmontado.
Mientras ellos siguen trabajando vamos dejando atrás la niebla, el camino serpenteante, y de repente aparece el sol. Si miras hacia arriba intuyes bajo ese manto de niebla los restos del parque eólico de Aldeavieja. Volveremos en primavera, a 1.580 metros de altura, para ver cómo Eolo vuelve a producir energía, está vez con más potencia.
Nota
El proyecto de Aldeavieja se ha acogido a los programas de concesión de ayudas a la inversión en la repotenciación de instalaciones eólicas, “Programas Repotenciación Circular” del «Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia – Financiado por la Unión Europea–NextGenerationEU. En concreto, los trabajos han recibido una ayuda de 6,51 millones, concedida por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE). Se estima que el parque eólico Aldeavieja inicie su fase de pruebas en octubre de 2025 para entrar en plena operación a finales de ese mismo mes.