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Consejos diarios para ahorrar en tu factura
- Revisar la tarifa y contratar la más adecuada.
- Aprovecha la luz natural al máximo.
- Lavadora y lavavajillas más eficientes.
- Una cocina que te ahorra dinero.
- Desenchufar lo que no se está usando.
- Tarifas y uso del gas eficientemente.
Revisar la tarifa y contratar la más adecuada
Este punto es importante y tiene que ver con las tarifas que tenemos contratadas en casa. Nunca está de más contrastar ofertas y revisar si tenemos la mejor opción, o la que más nos beneficia de acuerdo a nuestros hábitos y estilos de vida.
Esto es algo que puede ir cambiando con el tiempo, con factores como ser más o menos personas en casa, o teletrabajar o trabajar fuera de casa. ¿Nos interesa un precio fijo o por franjas horarias?
La tarifa de luz One Luz te garantiza que la luz “va a salir barata”. Es la mejor opción para una casa en la que se usa electricidad de forma estable a lo largo del día: el kWh tiene un precio fijo y económico.
En caso de estar menos tiempo en casa, y preferir organizar el consumo por horas, está la tarifa Tempo Happy 2Horas.
En cuanto al gas, la tarifa One Gas de Endesa es una de las más competitivas del mercado, por varias razones: un precio fijo, sin permanencia y con gestión online total.
Además, hay tarifas que tienen la posibilidad de aunar luz y gas para simplificar gestiones y combinar suministros, como la Tarifa One Luz y Gas. Una opción también con precio único, en la que no preocuparse por la mejor hora para usar los electrodomésticos, y sin permanencia.
Comparador de tarifas de Luz y Gas
En Endesa no tienes que adaptarte a nuestras tarifas porque ellas se adaptan a ti. Compara tú mismo las diferentes tarifas entrando en nuestro catálogo. O si lo prefieres responde a unas pocas preguntas y nosotros nos ocupamos de comparar entre todas las tarifas de luz y gas para ofrecerte una recomendación personalizada.
Descubre en un minuto la tarifa que mejor se adapta a ti:
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Aprovecha la luz natural al máximo
Este segundo consejo es muy importante, sobre todo en los meses de invierno.
- Si el escritorio o el ordenador se colocan bajo una ventana sacaremos más partido a la luz diaria.
Una vez pasamos a hablar de luz artificial, es importante revisar las bombillas de la casa, y cambiar las convencionales por bombillas de bajo consumo (si no lo hemos hecho ya). Aunque son un poco más caras, se consume hasta un 4 o 5% menos de electricidad. Duran más, y su gasto se amortiza en menos de un año.
Lavadora y lavavajillas más eficientes
Estos dos electrodomésticos los usamos con mucha frecuencia. A la hora de poner en marcha la lavadora o el lavavajillas, lo ideal es evitar programas de agua caliente y larga duración.
- Lavadora: modera las cantidades de detergente y suavizante porque si te pasas se alarga el aclarado. A más tiempo de lavado, más gasto. Y si el lavado es a 30ºC en lugar de a 40º, el ahorro será significativo y la ropa quedará igual de limpia. Si no puedes renunciar al agua caliente, un lavado a 40°C ahorra un 25% de energía en comparación con uno a 60°C.
- Lavavajillas: ponlo en marcha solo cuando esté lleno. Si cuenta con la opción de lavado ‘eco’, el consumo de electricidad puede reducirse hasta un 40%.
Una cocina que te ahorra dinero
- El frigorífico y el congelador se llevan casi una tercera parte del consumo de electricidad porque tienen que estar siempre en funcionamiento. Hay que controlar regularmente la temperatura: +5°C es suficiente para un frigorífico y -17°C para un congelador. También hay que optimizar el almacenamiento de cosas en la nevera para que el frío se distribuya correctamente. Y nunca guardes alimentos aún calientes: si lo haces le estás pidiendo a tu nevera que te cobre un poquito más en la factura por enfriarlos.
- Cocina de inducción: cubrir la olla cuando hierve el agua te va a hacer gastar hasta 4 veces menos electricidad en la preparación de tus platos.
- Microondas: evítalo para descongelar alimentos. La manera de ahorrar es descongelándolos a temperatura ambiente, que te sale gratis, en lugar de gastar kWh.
- Horno: procura abrirlo poco o nada mientras está encendido, ya que ese gesto desperdicia hasta el 20% del calor acumulado en su interior cada vez que lo abres. Otro truco es apagarlo antes de tiempo y aprovechar el calor residual (lo que tarda en enfriarse solo) para completar la cocción. Su correcto mantenimiento es también muy importante: si está bien limpio, será más eficiente.
Desenchufar lo que no se está usando
Otras recomendaciones son no dejar enchufados los electrodomésticos, en estado de reposo o stand-by, si no los estamos usando. Lo mismo con los cargadores de los teléfonos móviles y los ordenadores. Y, si en casa hay un termo eléctrico, es aconsejable enchufarlo solo durante las horas del día en las que se necesita.
También conviene prestar atención a las malas costumbres. Dejar la televisión encendida cuando no la estás viendo, el ordenador funcionando durante horas sin nadie delante, luces iluminando una habitación vacía... Son céntimos de euro cada mes que se van sumando.
Consejos diarios para ahorrar en gas
La calefacción en los meses más fríos del año es necesaria, pero altera notablemente el consumo de electricidad y gas mes a mes. Es algo que todos pensamos en cuanto empiezan a bajar los grados y toca hacer el cambio de armario.
La temperatura ideal para mantener el llamado ‘ambiente de confort’ en casa suele estar en torno a los 21 ºC, y cada grado adicional puede encarecer la factura en torno a un 7%. Algunos consejos son la reducción de la temperatura de los radiadores en 1 ó 2°C, o tener una temperatura de 18ºC mientras dormimos o estamos fuera de casa. Además:
- Ajustar la temperatura del calentador. Además de ajustar el termostato, también es importante fijarse en la temperatura del calentador. Lo máximo estaría en los 45 ºC, ya que una temperatura más elevada es demasiado y sube mucho el consumo.
- Un correcto mantenimiento de la caldera es garantía de ahorro, así como purgar y sacar el aire de todos los radiadores. De esta forma, también estaremos evitando averías y quebraderos de cabeza. Asimismo, los radiadores deben estar siempre despejados, sin ropa encima y hay que limpiarles el polvo de forma regular (con esto podemos ahorrar hasta un 10% de la energía consumida).
- Aprovechar las horas de sol. Del mismo modo que para ahorrar luz, el sol es la mayor fuente natural de calor que tenemos. Subir las persianas de las habitaciones, sobre todo en las ventanas con mayor iluminación, ayudará a mantener la temperatura ambiente para que la caldera no esté en marcha todo el día. Otro consejo es ventilar a diario, en las horas cercanas al mediodía, cuando se haya ido la humedad y el frío de la madrugada.
- Aislamiento de puertas y ventanas. Si estamos generando calor con la caldera en marcha, será importante retenerlo y asegurarnos de que no existen vías de escape. Es decir, que todas las puertas y ventanas estén cerradas y sin fisuras. ¿En qué parte de la casa vamos a estar más tiempo? Buscaremos concentrar el calor en ella.
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Siguiendo con los pequeños gestos que hacen mucho, colocar los grifos en posición de agua fría es un detalle que también puede ayudar al ahorro de energía. Estaremos evitando que por un lavado de manos se encienda la caldera o el calentador automáticamente.
Otros tips básicos son darse más duchas cortas y menos baños relajantes, cerrar el grifo mientras uno se enjabona, o que la temperatura del agua no exceda los 30º o 35ºC.
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