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Nerea de la Corte: “Seguimos avanzando en la descarbonización para conseguir las emisiones cero en 2040”
Un año más, la Oficina Española de Cambio Climático (OECC) ha registrado la huella de carbono de Endesa, en este caso la correspondiente al año 2020, y nos ha otorgado el triple sello. Es importante destacar que somos la única energética que obtiene el triple sello por cuarto año consecutivo.
Por Nerea de la Corte
La huella de carbono es una herramienta que mide las emisiones de gases de efecto invernadero, tanto las directas generadas por las actividades controladas por la compañía, como las indirectas sobre las que no tiene un control, pero si están asociadas a su actividad. Mediante la medición y el registro de estas emisiones en el Registro de Huella de Carbono de la OECC, hemos conseguido activar el sello “Calculo”. Este registro también permite constatar la disminución progresiva de nuestras emisiones, fruto del compromiso con la descarbonización de la compañía y el objetivo fijado en nuestro Plan Estratégico, junto con nuestra matriz Enel, de ser una empresa cero emisiones en 2040. El propio Registro nos reconoce el esfuerzo de disminución a través de la activación del sello “Reduzco”.
Además, una de nuestras iniciativas más importantes en materia de conservación del medio ambiente, la de Bosque Endesa, es la que nos permite activar el sello “Compenso” desde hace cuatro años, como mecanismo para compensar parte de las emisiones de gases de efecto invernadero que no nos es posible reducir.
Desde Endesa siempre hemos perseguido la excelencia en materia ambiental, y reconocimientos como este nos animan a continuar y avanzar aún más en este respeto al medio ambiente. Sobre todo, porque ahora estamos en un momento de transformación, de una transición energética que tiene un componente ambiental muy importante.
Otro punto crucial para continuar este camino de descarbonización es impulsar la transformación del modelo económico actual desde la linealidad hacia la circularidad. En Endesa estamos preparados para incorporar la economía circular a lo largo de toda la cadena de valor, y por eso la hemos integrado en nuestra cultura y en nuestras actividades, desde la construcción de nuevas plantas renovables, hasta la relación con nuestros clientes.
Debemos aceptar que cerrar el círculo es algo que tiene que impregnar a toda la sociedad. Tenemos que aprovechar al máximo los recursos del planeta porque son limitados. Empresas como nosotros tenemos la gran responsabilidad de convertirnos en agentes del cambio, y la transición energética es una gran oportunidad. Si las grandes compañías incentivamos y potenciamos determinados comportamientos a través de nuestros hábitos de compra, y del diseño de nuevos productos y servicios, nuestros proveedores y todas nuestras redes empezarán a moverse.
Hace falta que entre todos empecemos a impulsar este modelo circular que impregne al conjunto de la sociedad, porque la economía será circular o no será. Por ello, desde Endesa estamos presentes en muchos foros en los que ponemos en común con otras empresas nuestras prácticas y experiencias, y generamos sinergias para maximizar el impulso de la transformación.
Las administraciones tienen que hacer políticas que favorezcan este nuevo modelo, las empresas tenemos la responsabilidad de dar ejemplo en cuanto a implementación y promoción del mismo en nuestro día a día, y como ciudadanos tenemos el reto de ser más abiertos y receptivos a cambiar nuestros hábitos, así como a los nuevos productos y servicios que se nos ofrecen. Este planeta no es una herencia de nuestros antepasados, es un préstamo de las generaciones futuras; permitamos que lo disfruten.