¿Es positivo reducir el límite de velocidad para mejorar la calidad del aire?

Protocolo de actuación

En episodios de alta contaminación por dióxido de nitrógeno (NO2), se pone en funcionamiento un protocolo en el que se establecen tres niveles de actuación en función de las concentraciones de NO2 registradas en las estaciones de medición:

1. Preaviso: Cuando dos estaciones superan el nivel de 200 microgramos/m3 durante dos horas consecutivas.
2. Aviso: Cuando el nivel superado son 250 microgramos/m3.
3. Alerta: Cuando en tres estaciones se superan los 400 microgramos/m3 durante tres horas consecutivas.

Existen 3 tipos de medidas a llevar a cabo:

• Medidas informativas.
• Medidas de promoción del transporte público.
• Medidas de restricción del tráfico.

Cuando se han dado dos días consecutivos de preaviso o un día de nivel de aviso, empiezan a llevarse a cabo las medidas de restricción del tráfico.

La primera medida de restricción al tráfico es la reducción del límite de velocidad de 90 a 70 km/h en la M-30 y en los tramos de acceso a Madrid, comprendidos en el interior de la M-40. La segunda medida de restricción al tráfico es la prohibición del estacionamiento de vehículos en la zona SER (Servicio de Estacionamiento Regulado) del interior de la M-30.

Éstas son las medidas implementadas hasta el momento en Madrid, por haber llegado hasta la Fase 2. A partir de ese momento, si las condiciones hubieran seguido siendo peligrosas, las siguientes medidas incorporaban la restricción del 50% de los vehículos al interior de la almendra central y, posteriormente, de los taxis libres.

¿Es efectivo reducir la velocidad máxima de 90 a 70 km/h?

Estudios realizados en experiencias similares que tuvieron lugar en Ámsterdam o Barcelona, muestran que esta medida contribuye positivamente a reducir la concentración de estos gases contaminantes.

Pero esta reducción es compleja, ya que no se produce de forma lineal con la velocidad. Los beneficios son claros en vías rápidas, al bajar de 90 a 80 o 70 km/h, por ejemplo, pero limitar a velocidades inferiores sería contraproducente para la calidad del aire. Esto está muy relacionado con la conducción eficiente. Se consume menos y, por tanto, se contamina menos, cuanto menos pisemos el acelerador. Por ello conducir a una velocidad constante es menos contaminante que ir rápido y luego tener que frenar, y así sucesivamente.

De todos modos, las medidas que reducen de una manera más significativa la contaminación, son las restricciones al número de vehículos a la ciudad, pero esas medidas no son bien recibidas por la población. Es por ese motivo que son las últimas en tomarse. Primero se implantarán las medidas informativas y el fomento del transporte público.

El ayuntamiento de Madrid tiene previsto cambiar su protocolo por otro más restrictivo, ¿crees que tendrá buena aceptación?

Fuente: Elaboración propia/ Ayuntamiento de Madrid / Público

Imagen: ©kamasigns/DollarPhotoClub